Hay muchas formas de sustituir el huevo en la cocina vegana, pero para preparar recetas dulces mi opción preferida es el huevo de lino o linaza porque tiene una consistencia muy similar al huevo y no aporta sabor como es el caso de los plátanos o de la compota de manzana.
Además tiene un volumen similar y es muy fácil de preparar, sólo hay que batir semillas de lino con agua o mezclar las semillas ya molidas con agua en un recipiente y esperar unos 5 minutos hasta que tenga una consistencia viscosa, similar a la del huevo.
Es una opción bastante económica, sencilla y natural y por suerte ya podemos encontrar semillas de lino en muchos supermercados.
Vas a necesitar tres cucharadas de agua por cada una de lino.
Echamos las semillas y el agua en una batidora. Batimos hasta que esté perfectamente integrada.
Si tu batidora no es lo suficientemente fuerte no te preocupes, pero molelá un poco antes hasta que se haga polvo y luego añadir el agua y volvé a batir o mezclá directamente el polvo con el agua en un recipiente y remové con un tenedor.
Dejá reposar al menos cinco minutos hasta que espese.
El ideal es hacerlo en el momento, justo antes de usarlo.
Un dato: no compres semillas ya molidas ya que muchas veces han perdido su propiedad.