Para estas croquetas riquísimas vas a necesitar medio morrón rojo, medio puerro, un cuarto kilo de setas, aceite de oliva, un cuarto de cucharadita de nuez moscada, perejil picado y sal a gusto, media taza de harina integral, dos cucharadas de maicena y dos tazas de leche vegana. Además para el empanado vas a necesitar harina de trigo, tres cucharadas de harina de garbanzo, una cucharada de vinagre, un poco de sal y pan rallado.
Para empezar: picá el morrón, el puerro y los hongos. Sartenealos con el aceite hasta que esté doradito. Agregá sal, especias y mezclalo.
Agregá la harina y bajá un poco el fuego mientras seguís mezclando bien.
Disolvé el almidón en leche de soja y añadilo a la sartén poco a poco y sin dejar de revolver hasta que se forme una crema espesa.
Retirá del fuego y deja enfriar por completo.
Agarrar tres platos preferiblemente hondos. Poner en uno harina de maíz y en el otro la harina de garbanzos con el vinagre y la sal, y añadirle agua hasta que quedé una crema líquida. En el tercero poné el pan rallado.
Armá tus croquetas con la mano o con dos cucharas. Pasalas primero por harina, después en la mezcla líquida, harina de nuevo, mezcla de nuevo y finalmente pan rallado.
Una vez armadas las croquetas congelalas en una bolsa o embase cerrado.
Calentá abundante aceite en una cacerola ancha o sartén alta. Para probar la temperatura del aceite podes poner un poco del preparado, si burbujea ni bien la echás está listo.
Freí por tandas para no enfriar el aceite. A medida que las vas sacando ponelas en una rejilla o en papel de cocina absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Se puede comer caliente o a temperatura ambiente.